Miércoles, 23 de enero de 2013

Mensajes semanales
MENSAJE EXTRAORDINARIO DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, TRANSMITIDO DURANTE LA VIGILIA DE ORACIÓN, EN EL CENTRO MARIANO DE AURORA, PAYSANDÚ, URUGUAY, AL VIDENTE FRAY ELÍAS

Queridos hijos:

Con inmenso gozo los recibo en Mi Reino de Paz, pues ahora sus espíritus han entrado al Reino del Señor.

Como hoy les dije, hijos Míos, los invito a peregrinar con el corazón hacia Montevideo o Buenos Aires, para recibir el Mensaje que Yo daré en el mes de marzo a uno de Mis hijos videntes de Medjugorje.

Esta invitación maternal es de importancia celestial, porque Dios quiere mostrarles a todas Sus criaturas la grandeza de Mi Voz y de Mi Amor, los que se difunden en todo el mundo.

Queridos, es momento de conscientizar, desde el corazón, lo que Dios quiere revelarles en estos tiempos, a través de Mi llamado maternal. Mi Hijo también los acompaña por este camino de redención y transformación que sus corazones deben vivir.

Vendré en gloria desde los Cielos, durante el mes de marzo, a través de Medjugorje y de Mis Apariciones en Uruguay y en Brasil, como la Madre de la Divina Concepción de la Trinidad.

Quiero que comprendan, Mis hijos, que Mi Espíritu divino está intentado interceder por un mayor número de almas, almas que están en la Tierra, en el purgatorio y en el infierno.

Por eso, es importante el crecimiento espiritual de los grupos de oración y de peregrinos que vivan la primera misión de apostolado que hoy Mi Corazón les pide, el apostolado de ser ecuménicos en Cristo, llevando la paz a cada parte de la Tierra y viviendo Mi Paz como una lección de amor y humildad.

Ahora, estoy anunciando a todos este importante evento universal, que se dará a través de la venida un vidente de Medjugorje y de su mensaje divino, como también las Apariciones que acontecerán en este lugar del Uruguay y en el Brasil, en Mi Centro Mariano de Figueira.

Vean todo este acontecimiento como una Gracia primordial que Mi Corazón derrama a las criaturas en este tiempo de pruebas y cambios profundos.

Vendré desde los Cielos cuantas veces sea necesario, porque Mi promesa ante Dios es su salvación, conversión y redención.

En toda esta tarea maternal y universal, los ángeles que Dios Me encomendó y que Me acompañan, desde Mi Asunción hasta el presente, son seres divinos que también difunden espiritualmente Mi llamado por la paz a todos los Ángeles Custodios que cumplen un servicio obediente y abnegado sobre la Tierra para los corazones de todas las almas.

Queridos, así podrán comprender cómo es el misterio y la Voluntad infinita de Dios con todo lo creado en los universos. Mi tarea es anunciarles la verdad para que puedan crecer y así auxiliar a aquellos corazones que necesitan luz y paz.

Mis hijos, quien acompaña Mis preceptos, acompaña la Voz de Mi Hijo y Su llamado a la redención.

Como Madre de Nazaret, preparo a todas las consciencias para el nuevo tiempo, porque en ustedes está el poder del Amor de Dios que debe brotar de sus corazones e irradiarse al mundo entero.

Como lo dije en Fátima, ahora también, hijos Míos, los invito a la preparación del corazón para que, unidos en Cristo, puedan caminar con valentía hacia el Paraíso.

Los esperaré a todos los peregrinos de Cristo, durante el mes de marzo, en las Apariciones que sucederán con uno de Mis hijos de Medjugorje en Montevideo y Buenos Aires, como también en las Apariciones que sucederán en el Centro Mariano de Figueira y en la ciudad de Recife, en el Brasil.

¡Les agradezco, por aguardar una vez más Mi llamado!

María, Madre de la Divina Concepción de la Trinidad

Paz y Amor para todos.